domingo, 3 de enero de 2016

Jueves 26 de Noviembre, Entornos Virtuales, Diario de clase

¡Hola a todos!

Hoy os queremos traer un tema que está revolucionando en los últimos años el mundo educativo. Se trata de los nuevos entornos virtuales de aprendizaje, llamados más específicamente Learning Management System (LMS) o en castellano Entornos Virtuales de Aprendizaje (EVA)

Los entornos e-learning, no se tratan solo de situar un curso en un ordenador, sino de la combinación de recursos, de su interactividad, de las actividades de aprendizaje estructuradas y con sentido... todo esto conociendo las posibilidades y las limitaciones que un EVA nos ofrece. Luego siempre habrán premisas más específicas de qué tipo de EVA escoger, pero éstas estarán sujetas al tipo de enseñanza/curso que se quiera impartir.


Un Entorno Virtual de Aprendizaje se podría describir, cómo Belloch C. nos relata, cómo entornos que:
  • Permiten el acceso a través de navegadores, protegido generalmente por contraseña o cable de acceso.
  • Utilizan servicios de la web 1.0 y 2.0.
  • Disponen de un interfaz gráfico e intuitivo. Integran de forma coordinada y estructurada los diferentes módulos.
  • Presentan módulos para la gestión y administración académica, organización de cursos, calendario, materiales digitales, gestión de actividades, seguimiento del estudiante, evaluación del aprendizaje.
  • Se adaptan a las características y necesidades del usuario. Para ello, disponen de diferentes roles en relación a la actividad que realizan en el EVA: administrador, profesor, tutor y estudiante. Los privilegios de acceso están personalizados y dependen del rol del usuario. De modo que, el EVA debe de adaptarse a las necesidades del usuario particular.
  • Posibilitan la comunicación e interacción entre los estudiantes y el profesor-tutor.
  • Presenta diferentes tipos de actividades que pueden ser implementadas en un curso.
  • Incorporan recursos para el seguimiento y evaluación de los estudiantes.

Otro autor reconocido en el mundo del aprendizaje virtual (Boneu, 2007), nos dice que existen cuatro características básicas e imprescindibles que un Eva debería tener:


Es cierto, que a raíz de la aparición de estos entornos (y de su reciente modernización y buena funcionalidad, muchas plataformas de aprendizaje e-learning (así cómo universidades a distancias, títulos y cursos de todo tipo, MOOC...) han evolucionado y han aumentado su prestigio y popularidad en los últimos tiempos.

  • Interactividad: conseguir que la persona que está usando la plataforma tenga conciencia de que es el protagonista de su formación.
  • Flexibilidad: conjunto de funcionalidades que permiten que el sistema de e-learning tenga una adaptación fácil en la organización donde se quiere implantar, en relación a la estructura institucional, los planes de estudio de la institución y, por último, a los contenidos y estilos pedagógicos de la organización.
  • Escalabilidad: capacidad de la plataforma de e-learning de funcionar igualmente con un número pequeño o grande de usuarios.
  • Estandarización: Posibilidad de importar y exportar cursos en formatos estándar como SCORM.



¿Estamos llegando a un punto en el que el aprendizaje e-learning cobrará la misma relevancia que la presencial? ¿Esto puede ser perjudicial o beneficioso para la formación de futuros profesionales? Sí que es cierto que hoy en día no es muy común el prototipo de persona que se haya formado en su hogar, mediante internet exclusivamente. Pero al igual que ha surgido el fenómeno de los hikikomori en Japón, ¿no es posible que surja un fenómeno parecido en estudiante titulado y formado? Porque aunque éste haya demostrado poseer y haber aprendido importantes competencias, la función social/comunicativa no se desarrolla, salvo por las letras que ahora mismo puede usted estar leyendo.

¿Qué es lo qué pensáis? ¿llegaremos a esto algún día?

No olvidéis comentar, ¡Hasta Mañana!








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